Disfrutando del mar (Seth)

Había estado pensando en todo un poco, pero Seth necesitaba despejar sus ideas. Por una banda apoyaba a Jacob, porque para él era un modelo a seguir, desde siempre había tenido una profunda admiración por él, pero por otro lado comprendía a Edward, porque a pesar de que sonara raro, era el único licántropo, que a pesar de a veces, no recibir lo mismo a cambio, no odiaba como el resto de los suyos, a la família Cullen. Aunque apoyaba a los dos, estaba claro que no le gustaba la diea de que Jacob separara a Bella y Edward, porque además de traer muchos problemas, Bella había elegido y le gustase o no a Jacob, debería conformarse con ser su mejor amigo, aunque sabía que de la manera que era, no se daría por vencido.

También tenía sus preocupaciones, como la nueva licántropa que se había unido a la manada, Catherine, además de que la ahbía ayudado en sus primeros días de transformación y estaban pasando mucho tiempo juntos, empezaba a gustarle más, estar con ella. La veía más atractiva y cada vez quería pasar más tiempo con ella, esperando que ella no notara nada, porque seguro que le gustaba algún otro de la manda, él era el más joven y el menos fuerte, entre lobos, eso no triunfaba. Triunfaba el macho fuerte y con dotes de mando, cosa que él, de momento no tenía. Ahora que se había convertido, casi siempre iba sin camiseta, para soportar el color y pantalones cortos y así se acercaba andando hacia la zona donde estaba Catherine, pero como iba con la cabeza gacha, no la había ni visto.

Seth se acarició el brazo, aunque en Forks se veía poco el sol, él siempre tenía calor, como todos los de su raza y manada, en La Push era muy normal ver a todos los jovenes y no tan jovenes sin camiseta, incluso cuando iban por la ciudad, era algo normal y la gente había empezado a acostumbrarse, sobretodo las chicas, que veían con buenos ojos un montón de chicos morenos mostrando musculo. Sin embargo, a él eso no le interesaba tanto, sabía lo que quería, pero quería tomarse su tiempo, a Jacob le había salido mal, eso de enamorarse de Bella y aunque él, lo mantenía en secreto, ya había encontrado su imprimación y justo cuando levantó la cabeza de sus pensamientos, debido al olor que llegaba a su nariz, la encontró, Catherine.

Parecía que ella no se había dado ceunta de su presencia, la verdad es que era una chica muy guapa y el haber compartido tantos momentos con ella y al verla convertida en una licántropa, se imprimó de ella, aunque aún no había dicho, ni hecho nada, no quería que ambos sufrieran. Sin embargo, esa imprimación, hacía que quisiera pasar más tiempo con ella, conocerla, tratarla, saber que le gustaba y sobretodo, compartir con ella, sensaciones increíbles que sentía, al estar cerca. Él no dudó en acercarse a ella con una sonrisa, aún de pie, habló - Hola Catherine, disfrutando de un buen día, sin mucho calor? - Se rió guiñándole un ojo.

Seth se dió cuenta de que ella parecía no darse cuenta, que había puesto rumbo hacia donde ella estaba sentada. Seguía con la misma sonrisa, que no podía borrar siempre que estaba con Catherine. Se acercó un poco más hasta quedar justo a su lado, donde se cruzó de brazos y se esperó que ella quisiera responderle, no tenía ningúna prisa. Cuando las palabras salieron de los labios de Seth, ella se giró hacía él y le sonrió, parecía ligeramente forzada, pero seguramente eran imaginaciones suyas, así que escuchó su saludo y justificarse que con eso de la licantropía tenía más calor. Una risa, nada escandalosa, salió de su garganta, la verdad es que la chica tenía gracia. A Seth le encantaba tener tanto tiempo para compartir con una chica como ella, enseñarle cosas sobre la licantropía y vigilar cuando ella se transformaba que no se descontrolara.

Con una sonrisa en los labios, añadió - Vaya, ocurre algo? te noto .. algo tensa, puede ser? - Mientras se frotaba la nuca con delicadeza, por debajo los cabellos y añadió - Pues me alegro de encontrarte aquí con calor, porque así me comprendes y yo, siento exactamente lo mismo. Te importa que me siente contigo? - Haciendo el movimiento de sentarse, para luego añadir - Esas gafas de sol te quedan muy bien, aunque, sinceramente, prefiero ver tus ojos, que son muy bonitos, sirve como excusa, para poder verlos? - Se ríe sacándole la lengua juguetón, cual niño pequeño, pero Seth era así, inocencia pura, y tenía gestos que lo demostraban, aunque por fuera, aparentaba ser un chico más maduro de lo que su carácter cuando lo tratabas, demostraba.

Observó como ella escuchaba atentamente las preguntas que él hacia. También vió como se sonrojaba y ese ligero rosa en sus mejillas, hacía que le pareciera tan o más hermosa que siempre, así que con una sonrisa, se sentó a su lado, no muy lejos, pero tampoco alarmantemente cerca, lo justo para estar a su lado. Observó sus ojos cuando ella levantó las gafas, la verdad es que eran preciosos, pero sabía que la imprimación hacía que él le pareciera absolutamente hermosa y atrayente. Pero si ella se imprimaba de algún otro, adiós a su felicidad, porque no podría soportar, vivir sin ella. Al parecer ella meditaba sobre si contarle lo que le sucedía y no se hizo esperar, al parecer tenía muchas ganas de saber las respuestas, le preguntaba que era lo que sentía con ese chico.

Decía que moría al estar lejos y que su mundo era él y lo que le sucedía a su alrrededor, sin duda, ella se había imprimaod de alguien y por la forma como lo explicaba, no era él. Sonrió a Catherine, pero de una forma bastante forzada, incluso ella podía notarlo - Eh.. pues... lo que sientes y lo que te pasa es fácil de explicar - Hizo una pausa mriando hacia el agua y luego mirándola a ella - Lo que te pasa, los licántropos lo llamamos imprimación. Consiste en que un licántropo o una licántropa, siente una especie de flechazo a primera vista, empieza a gustarle mucho esa persona, de golpe, siente que no puede respirar sin esa persona y que no podría soportar que estuviera con otro u otra, y aunque sientas algo por otra persona o quieras, o te aparees con otra persona, nunca sentiras ni la mitad de lo que sentirás por tu imprimación, es como un vínculo que se crea la primera vez que le ves - Sonrió, esperando haberse explicado bien, y luego añadió - Y quien es el afortunado? - Se rió, intentando que Cath, no notara que él parecía nervioso hablando de eso y que así, se lo contara.

Ella se sorprendió por algo, pero no parecía ser algo que la incomodara o le hubiera sorprendido para mal. Mientras él le contaba todo ella escuchaba atenta y se lo agradeció con una sonrisa, pues cuando uno hablaba, le gustaba ser escuchado y Seth era de los que agradecía mucho las cosas, los pequeños detalles que le hacían feliz. Cuando Seth preguntó por el afortunado, parecía que no sabía que decir, solo se mordía el labio inferior y no dijo nada. Quizás le gustaba alguno de la manada, algún humano o se había imprimado de algún vampiro o simplemente le gustaba algún vampiro, como le pasaba a Jacob, él lo respetaría, no le gustaría perder a Cathe por nada del mundo y menos por una tontería de celos, aunque ahora que no se lo quería decir, notaba como los sentía, los notaba, porque en su interior se notaba enfadado? Malditos celos, si no eran pareja ni nada, porque sentía todo eso? Cuando ella estiró el brazo y agarró su mano, se sentía el chico más feliz de La Push y de la faz de la tierra, tenía a la chica de la que se había imprimado tan cerca y cogiéndole la mano, con las suyas, tan suaves. No pudo hacer nada más que sonreír y acariciar sus dedos cuando ella entrelazaba ambas manos.

Cuando ella lo miró a los ojos, pensaba que le daría una respuesta, pero solo le dijo que algún día se lo diría, aunque viendo como se sonrojaba y según sus palabras, él le conocía y al parecer ella se avergonzaba de que él lo supiera . Iba a decir algo, pero dejó que ella se apoyara en su pecho, con una sonrisa le acarició lentamente el pelo, con su mano libre, con la otra, la abrazó, sin soltar su mano. Notó algo humedo encima de su torso, y agachó un poco la vista, viendo que algunas lágrimas salían delos ojos de ella y entonces le dió un beso en el pelo, para relajarla - Eh, porque lloras Cath? te sabe mal.. no decírmelo, o algo? Es Jacob, o alguno de los licántropos de La Push? algún amigo mío? o simplemente.. no quieres.. contarmelo? - Entonces la abrazó con ambos brazos - No llores, seguro que todo sale bien con tu imprimación, si es un afortunado de que se haya imprimado de él, una chica tan guapa y con una sonrisa tan bonita y tan buena persona. - Se rió sacándole la lengua y le dió un beso en la frente, mirándola a los ojos.

Al ver que al acariciarle el pelo ella lloraba con más fuerza, creyó que lo que había dicho o hecho no le había gustado, quizás le gustaba alguien demasiado cercano a él y se había imprimado y le dolía porque estaba imprimado de otra chica, no lo sabía. Pareció que el beso que Seth posó en su cabello la despertó, haciendo que dejara de llorar e incluso soltara una risita, eso estaba muchísimo mejor. Al parecer esa risita quería decir que no, que no era Jacob, normal, además de que él ya tenía suficientes problemas con Bella, como para sumarle más ahora. Observó sus ojos cuando ella le miraba fijamente, sonrojándose ligeramente, desviando la mirada, tímido, pero volviendo a mirar cuando ella se secaba las lágrimas, no era un rechazo, pero esa mirada de Catherine, le intimidaba. Le pedía perdón por algo que iba a suceder, no sabía a que se refería, pero se lo decía en voz baja, cual secreto y además, oyéndose sus palabras muy seguras, aseguraba que lo haría aunque se enfadara, ahora dudaba sobre lo que a ella, le sucedía. No sabía que quería hacer, solo sabía que era algo serio y que no debía tomárselo en broma, así que la observó totalmente serio.

Iba a preguntarle sobre que tenía previsto hacer, pero antes de poder preguntar, ella levantó la cabeza de su pecho, le estaba mirando a los ojos, como si no quisiera que él la dejara de mirar o eso le hacía sentir más segura. Al ver como ella se acercaba se sorprendió, podía ver cada vez más cerca el rostro de la chica, viendo la cuidada y fina piel de su rostro, esa mejilla que tanto le gustaría tocar en ese momento. Cuando ella se mordió su labio inferior, iba a preguntarle, pero no tuvo tiempo, ella acabó de acortar la distancia entre ambos y juntó sus labios a los de Seth. Se quedó absolutamente sorprendido, no sabía que hacer, se sonrojó y empezó a sentir cosas extraordinarias, al parecer, quien le gustaba era él, pero no sabía si él era su imprimación, pero eso ahora era secundario, no iba a dejar escapar esta oportunidad y con una sonrisa, colocó una mano en su mejilla, acariciando con suavidad y respondiendo, moviendo sus labios, besándola ahora él.